Capitulo 3

Ya habíamos llegado. Nuestra madre estaba allí esperándonos

- hola hijo – dijo mi madre y le abrazó- hola hija –me abrazó también pero yo no me moví

-mamá, ¿sabes que tengo novia? – dijo Álvaro feliz

-¿enserio? ¿Desde cuándo? ¿Cómo es?

Durante el camino estuvieron hablando entre ellos. Yo iba callada, escuchando música de mi Ipod.

María: ya hemos llegado

Cuando miré la casa me quedé alucinada. No recordaba que fuera tan grande

-¡enana! Cierra la boca que te van a entrar moscas –se rió

-ja ja que gracioso hermanito –dije irónicamente

Al entrar en la casa no sólo estaba Cameron, sino que también había unos cuantos chicos de la edad de mi hermano. Cuando los vio mi hermano se puso muy contento y se acercó rápidamente a saludarlos

-¡oh! Se me olvidaba. ¿Os acordáis de mi hermana Almudena?

-¿Cómo no voy a acordarme de ella? –dijo un chico de pelo cobrizo con unos ojos marrón miel que me derretían

-¿no te acuerdas de nosotros no? –dijo un chico alto y rubio de ojos azules

-emm pues no, lo siento -dije un poco avergonzada

El chico de pelo cobrizo parece que se entristeció un poco

-un momento… sí, vosotros sois Justin Bieber, Ryan Buttler, Chaz Somers y Christian Beadles –dije con una sonrisa

-¿entonces si sabes quienes somos? - preguntó Justin con una sonrisa

-claro, millones de personas lo saben

vale, no te acuerdas - la sonrisa desapareció de su cara

-¿de qué debería acordarme?

-nada no importa –dijo Justin algo decepcionado

-cada verano cuando veníais tu hermano y tú, siempre íbamos todos juntos al parque. Y mi hermana Caitlin también, erais las mejores amigas. Hoy no ha podido venir pero mañana ya la verás – dijo Christian y sonrió- y también saliste con Justin, con él te diste el primer beso, con tan solo siete años –volvió a sonreir

-entonces…tú eres… ¡oh dios! –abracé fuertemente a Justin sonriendo

-ya te acuerdas - afirmó Justin

-por supuesto que sí –emocionada- sabía que había estado con un Justin pero jamás me imaginé que fueras tú –sonreí

-enserio que no te acordabas de nosotros? -dijo Ryan

-sabía que me juntaba con algunos niños aquí pero no me acordaba de los nombres. Perdimos el contacto y eso con el tiempo he ido olvidando, pero ahora que me lo habéis recordado me acuerdo de todo

-al menos ya te acuerdas –sonrió Chaz

-sí, bueno, voy a dejar las maletas y eso, luego nos vemos –les di dos besos a cada uno y subí a mi habitación

La habían pintado, antes era rosa y ahora era de un lila claro bastante bonito. Había un corcho grande en una de las paredes así que cogí las fotos que tenía con mis amigas y las colgué en él. Después saqué toda la ropa y las cosas que había traído y las puse en su sitio.

En hacer esto tardé como una hora o así. Bajé a comer algo y luego volví a meterme en mi cuarto. Me conecté pero no estaban ninguna de mis amigas así que apagué el portátil.

-Almudena! He quedado con estos, te vienes? - me preguntó mi hermano

-sí, espera que me ducho

Me fui deprisa al baño, me di una ducha rápida y me puse unos pitillos negros, una camiseta de I love NY y unas converse rojas

-¡ya estoy! –dije bajando las escaleras

Al bajar me encontré con que todos estaban allí

-vas muy guapa - me dijo Ryan

-gracias –sonrojada

-deja de tirarle los tejos a mi hermana –bromeando- vámonos a hacer skate

-yo no tengo

-yo tengo dos, así que te lo dejo- dijo mi hermano

-está bien

Nos fuimos a la pista de skate. Estábamos pasándonoslo genial hasta que una chica morena se acercó a nosotros

-hola Justin –dijo una chica con una sonrisa seductora y le besó

¡No me lo podía creer! ¡Era la Jasmine Villegas! O sea que era verdad eso de que salían…

-hola Jasmine –sonrió pero el resto del grupo estaba callado y parecía que intentaban controlarse para no decirle de todo a Jasmine - ¡oh! Emm… Jasmine esta es Almudena, Almudena ella es Jasmine

Le di dos besos a regañadientes. Ella me miraba de arriba abajo con cara de asco y yo no me quedaba corta. ¿Qué se creía la niñata esa? Como siguiera así le iba a bajar los humitos

-emm esto… se me ha olvidado que tenía que ayudar a mi madre con…emm a limpiar la casa, ¡eso! Tengo que ayudarla a limpiar la casa, adiós –mentí y me fui a paso ligero

-¿qué le pasa a tu hermana? –dijo Justin extrañado

-no tengo ni la menor idea…